Esta es la portada de un disco de Howlin' Wolf lanzado en 1968, creo. La cosa es que la gente de Chess, su sello, pensó que era buena idea volver a grabar los grandes temas de bluseros emblemáticos, como él y Muddy Waters, con acompañamientos que imitaran lo que hacían Jimi Hendrix, Cream, John Mayall, etc.
Grabaron el disco y, claro está, a Mr. Wolf no le gustó nada. La cosa, al igual que el concepto publicitario de la portada, no funcó. Es muy ridículo plantear la idea de que es posible producir buena música sin que uno se de cuenta.