Insomnio. Homero. Tensas velas.
Leí hasta la mitad del catálogo de las naves:
la nerviosa bandada, el torrente de grullas
que una vez se alzaron sobre Hellas.
Vuelo de grullas que cruzan fronteras extrañas,
líderes empapados con la espuma de los dioses.
¿Hacia dónde navegan? ¿Qué sería Troya para ustedes,
hombres de Acaya, sin Helena?
El mar -Homero- se mueve por amor. ¿Pero a quién
debo oír? Homero no dice ni pío.
el Mar Negro ruge como un discurso
y retumba en la cama.
1915
(Foto de 1914)